
la situación
Puedes cancelar hasta el
100% de tus deudas
La Ley de Segunda Oportunidad (LSO) ofrece un nuevo comienzo para personas físicas, tanto particulares como autónomos, que se encuentran en una situación financiera insostenible.
Esta Ley exonera deudas a particulares y autónomos por no disponer de los activos o patrimonio suficientes para hacerles frente.
Se trata de un proceso concursal de persona física donde podemos alcanzar la cancelación completa de las deudas o un buen acuerdo con los acreedores.
La Ley de la Segunda Oportunidad se aprobó en España en el año 2015 y está regulada en la Ley 25/2015, entrando en vigor el 30 de julio de 2015, con el objetivo de facilitar una solución legal a las personas sobre-endeudadas, para que puedan rehacer su vida sin tener que arrastrar sus deudas de forma indefinida. Es decir, dándoles una segunda oportunidad para volver a empezar.
El 26 de septiembre de 2022 entra en vigor la reforma de la Ley Concursal TRLC desencadenada por la Unión Europea para homogeneizar la normativa sobre reestructuraciones e insolvencia en Europa, o sea, el derecho a una Segunda Oportunidad.
La nueva ley Concursal configura un procedimiento de segunda oportunidad más eficaz, que permite la exoneración de deudas contra la AEAT y la Seguridad Social, posibilita la exoneración sin liquidación del patrimonio y suprime la fase extrajudicial.
Todas las personas físicas, particulares o autónomos, que hayan actuado de buena fe y se encuentren en situación de insolvencia o prevén que no van a ser capaces de hacer frente a sus deudas en un futuro cercano.
Algunos de los requisitos más importantes para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad son:
Para optar por esta ley, el deudor debe cumplir una serie de requisitos que tienen como objetivo verificar y demostrar que ha actuado correctamente y sin malas intenciones, para ello se tendrá en cuenta lo siguiente:
La reforma de la Ley Concursal aprobada por el Congreso de los Diputados en septiembre de 2022 afecta directamente a la Ley de la Segunda Oportunidad en:
Puedes recibir
la exoneración total o parcial
de las deudas.
Te da la oportunidad de
reconstruir y recuperar
tu vida financiera.
además de cancelar tus deudas por ley:
Tienes derecho a
recibir crédito
de nuevo.
Tus acreedores
dejarán de acosarte.
Borra tu nombre de los
ficheros de morosidad.
Sin necesidad
de liquidar tu patrimonio.
Una vez
iniciado
el procedimiento.
El importe de
tu deuda no crece
además de las ventajas mencionadas podríamos destacar:
Como desventajas de la Segunda Oportunidad destacamos:
Las deudas que puedes cancelar mediante esta legislación son:
Cada tipo de deuda tiene un tratamiento específico bajo la Ley de Segunda Oportunidad:
A partir de la reforma de la Ley de Segunda Oportunidad aprobada en septiembre de 2022, la cancelación de deudas se convierte en Derecho y no solo en beneficio. Seguramente, desde su incorporación, el EPI ha sido uno de los mecanismos más relevantes introducido por la Ley de Segunda Oportunidad, el cual le permite a la persona deudora e insolvente que actúa de buena fe, anular totalmente las deudas que le sean impagables dada su situación.
En definitiva, el EPI significa una segunda oportunidad para las personas físicas que se encuentran en situación de sobreendeudamiento o insolvencia, que podrán volver a empezar, sin que las deudas acumuladas le impidan hacer negocio o volver a ser solvente
Una vez finalizado el proceso, existen varias posibilidades:
El plan de pagos es un calendario en el que se fija la cantidad que el deudor pueda asumir para pagar a los acreedores, no siendo necesaria la liquidación de su patrimonio para llegar a un acuerdo.
Se trata de un instrumento regulado en la Ley Concursal, que acompaña las propuestas de convenio para acreditar la capacidad de cumplir con las reestructuraciones de deuda.
También puede organizar otras medidas, como la cancelación de algunos de los créditos o su conversión en otros medios de pago (dación en pago o para pago, capitalización de crédito)
La parte de la deuda que no se cancele en el EPI se reestructurará, organizándose de tal modo que pueda pagarse en un plazo de 3 o 5 años, tiempo máximo para pagar la totalidad de la deuda recalculada, siendo de obligado cumplimiento para el deudor. Solo se exceptúan aquellas deudas que tengan un vencimiento superior.
Su diseño es fundamental para la reestructuración y reunificación de la deuda, conforme a unas condiciones que permitan al deudor hacerse cargo de las mismas de una forma más cómoda.
Es el Juez el que aprobará el plan de pagos y durante su vigencia los créditos seguirán sin devengar intereses.
Antes de poner en marcha este procedimiento, es conveniente asesorarse adecuadamente. Saber de antemano qué resultados puedes obtener, cómo presentar correctamente la solicitud y qué deudas incluir en ella.
El contenido de la solicitud debe ser detallado y claro para informar muy bien sobre la situación personal que se atraviesa, así como de las deudas e ingresos con los que se cuenta. Por ello será necesaria la aportación de bastante documentación.
Elaborar bien esta solicitud es muy importante, puesto que si no se realiza correctamente ni con toda la información puede dar lugar a que se inadmita, de manera que no se podría acoger a la Segunda Oportunidad.
En consecuencia, es crucial estar bien asesorado por profesionales como los de Kubo Legal para evitar que la información, datos y documentos que se aportan con la solicitud resulten insuficientes, de manera que pueda dar lugar al rechazo o inadmisión.
Esta legislación ha sido creada para brindar una vía de escape a personas sobre-endeudadas. Sin embargo, aprovecharla de manera efectiva y exitosa requiere un conocimiento profundo de las complejas regulaciones y procedimientos legales implicados.
Es muy importante presentar la solicitud de Segunda Oportunidad respaldado por un despacho de abogados expertos en la materia. De lo contrario, no tendrás la garantía de que se haya procedido correctamente y podrían llegarte ejecuciones de embargo y citaciones de juicio monitorio.
Un profesional especializado te ayudará a garantizar que tus derechos están protegidos y a obtener la mejor estrategia para resolver el endeudamiento de manera efectiva.
El equipo de Kubo Legal cuenta con el conocimiento y experiencia necesarios para analizar tu situación y brindarte una visión clara de tus opciones legales.
La Ley de Segunda Oportunidad es una normativa legal que permite a particulares cancelar sus deudas y obtener un nuevo comienzo financiero.
La Ley de Segunda Oportunidad para particulares proporciona un mecanismo legal para negociar la deuda y buscar acuerdos de pago o la exoneración de las mismas.
Para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad en España, se deben cumplir requisitos como estar en situación de insolvencia, actuar de buena fe y no tener antecedentes penales.
Las segundas oportunidades de deudas son oportunidades legales para cancelar o renegociar las deudas existentes y comenzar de nuevo en el ámbito financiero.
Para solicitar la Ley de Segunda Oportunidad, es recomendable contar con la asesoría de un abogado especializado en el área, quien te guiará a través del proceso de solicitud.
La Ley de Última Oportunidad es un término que se utiliza a veces para referirse a la Ley de Segunda Oportunidad, ya que ambas buscan brindar una oportunidad de cancelación de deudas.
Las deudas pueden cancelarse mediante acuerdos de pago, quitas o la exoneración total o parcial de las mismas, según las condiciones establecidas en la Ley de Segunda Oportunidad.
La Ley Concursal es un conjunto de normativas que regula los procedimientos de insolvencia, incluida la Ley de Segunda Oportunidad, que forma parte de este marco legal.
La exoneración de deudas puede solicitarse mediante un procedimiento legal dentro de la Ley de Segunda Oportunidad, donde se evaluarán las circunstancias y se tomará una decisión.
Sí, la Ley de Segunda Oportunidad es una ley vigente y establecida en el sistema legal de muchos países, incluyendo España, y ha brindado oportunidades de alivio financiero a muchas personas.
Un mediador concursal es un profesional designado para mediar y facilitar las negociaciones entre las partes involucradas en un proceso de insolvencia o de Ley de Segunda Oportunidad.